Video Gripe porcina

miércoles, 30 de mayo de 2007

Hoy insisto...

Insistir y persistir. Insistir con persistencia.
Uno de los elementos más determinantes del éxito o fracaso del tratamiento del virus de inmunodeficiencia humana es la adherencia. Se trata de la cualidad de apegarse estrictamente a las medidas terapéuticas prescritas, tomando cada medicamento en la dosis indicada y a la hora indicada sin demoras, fallos ni excusas. Cuando no se insiste ni se persiste en ser adherente y fiel al tratamiento antiretroviral se corre inminente peligro de que el virus se haga resistente a una o mas medicamentos, lo que traerá como consecuencia una rápida multiplicación del virus (aumento de la carga viral), seguida de una disminución de las defensas (caída de las células CD4), y la aparición de nuevos síntomas e infecciones oportunistas. Estamos hablando del fracaso virológico, inmunológico y clínico.

Pero en este blog no trato de enseñar a nadie tecnicismos, microbiología, virología o HIV medicine. Podría confundir a los que saben poco u ofender a quienes mucho saben. No se el grado de conocimiento de eventuales lectores. Solo trato de pensar en voz alta, como cuando nadie me esta escuchando, aunque pueda parecer loco o tonto; y escribir en mi diario, aunque no escribo diario, como si nadie me estuviera leyendo. Quisiera aprender y reflexionar algo mas que solo medicina, pues cada vez mas miro el HIV como un problema humano, mas que como un diagnostico medico.

Una cosa en común que tienen los/las pacientes exitosos/as es su insistente adherencia. Cada vez que leo el reporte de carga viral indetectable lo confirmo. Este paciente insiste…Insiste en vivir, en aferrarse a la vida, en acudir a las citas con el medico, la enfermera, consejera o equipo de apoyo; insiste en tomar los medicamentos correctamente. Insiste y persiste. Su insistencia perdura en el tiempo.

Pero esa insistencia que perdura, insistencia persistente, no solo es vital para el tratamiento antiretroviral exitoso, sino para todo aspecto de la vida. Nada ha sido logrado intentando unas cuantas veces y no más. Es muy famosa la historia de Abraham Lincoln, quien insistió en procurar ser presidente hasta lograrlo aun luego de tantos fracasos que habrían desanimado a cualquiera. Muy celebre también Edison, quien con su insistencia logro inventar la bombilla eléctrica a pesar de mil fracasos. Y la lista de ejemplos podría llenar miles de páginas.

Igualmente la otra cara de la moneda… No importa cuan buenos sean mis propósitos, si no persisto en ellos jamás serán realidad. Si el estudiante no insiste en estudiar su materia muy probablemente reprobara la asignatura y su deseo de lograr el diploma anhelado se alejara más y más. Asimismo el emprendedor que no persiste en su empresa o negocio pronto estará quebrado... Gran cantidad de sueños se han quedado solo en la imaginación por la falta de insistencia en alimentarlos y trabajarlos. Esta fragilidad de insistencia ha malogrado tantas ideas hermosas y productivas…y probablemente todos hemos tenido oportunidades desaprovechadas por no insistir.

Por eso hoy quiero insistir en vivir, y vivir insistiendo, haciendo cada día algo que me acerque a mis metas, confiando en que veré los resultados de mis esfuerzos y de la gracia de un Dios que ha insistido en amarme, en rescatarme y en llenarme de esperanza a pesar de mi mismo.

Dr. Isaac Brito
Web: www.tesoros.ws
Blog: www.contraelvih.org
Grupo: www.contraelvih.com